A mis compañeros cercanos,
a los compañeros lejanos,
a aquellos que aún no se asumen como tales
o quizás, peor, a los que ya no se asumen compañeros...
Demos la vida viviéndola,
hagamos la lucha peleándola,
aprendamos del ejemplo superándolo.
Pero, por favor, compañeros,
no dejen la causa por el desencanto;
hagamoslo al encanto,
contibuyamos a la critica,
motoricemos al enojo.
Porque si no somos compañeros
no vivimos ni peleamos
ni tampoco luchamos,
es la soledad la que nos acabardará
Y si no hacemos la mística con el encanto,
ni la construcción con la crítica,
al motor con el enejo
y a la formación con los datos,
es la obsecuencia, compañeros,
la que no dos dominará,
y seremos serviles del enemigo
con la hipocresía de ver y saber
sin hacer...
a los compañeros lejanos,
a aquellos que aún no se asumen como tales
o quizás, peor, a los que ya no se asumen compañeros...
Demos la vida viviéndola,
hagamos la lucha peleándola,
aprendamos del ejemplo superándolo.
Pero, por favor, compañeros,
no dejen la causa por el desencanto;
hagamoslo al encanto,
contibuyamos a la critica,
motoricemos al enojo.
Porque si no somos compañeros
no vivimos ni peleamos
ni tampoco luchamos,
es la soledad la que nos acabardará
Y si no hacemos la mística con el encanto,
ni la construcción con la crítica,
al motor con el enejo
y a la formación con los datos,
es la obsecuencia, compañeros,
la que no dos dominará,
y seremos serviles del enemigo
con la hipocresía de ver y saber
sin hacer...
Excelente poesía, Julieta!
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